El nuevo mundo y sobre todo de México a la Patagonia, es el llamado a convertirse en la mayor despensa mundial de alimentos y no solo por países como Brasil, Argentina, EEUU que son de los mayores proveedores de alimentos a nivel mundial. Sino por el origen de muchos de los super alimentos que se consumen hoy en día y por nuestras cocinas madres la mexicana y peruana
Así como en la antigua Mesoamérica se intercambiaban alimentos como el: El maíz cacao, aguacate, papa, yuca, coca, tomate, Frijol, calabaza, amarranto, quinua, Sacha Inchi, Acai, de México a Argentina. Hoy es el momento de potenciar ese intercambio y de exportarlo a otras latitudes. Pues el origen de todos estos alimentos es Latinoamericano.
El maíz es nuestro alimento madre, se dice que los indígenas son los hijos del maíz. Existen muchas variedades de maíces autóctonos que han desaparecido, por el uso de una sola variedad de maíz más resistente y productivo. Pero menos sabroso y alimenticio. Rescatar maíces como el capio en nuestra cultura paisa es una forma de rescatar las costumbres de nuestros arrieros que tanto lo consumían en la arepa.
Todavía en nuestros días, existen algunas zonas del continente donde es común encontrar el cultivo de la milpa como en Yucatán México. La Milpa fue el cultivo más común en Mesoamérica. Pues era la base de nuestra alimentación en aquella época, con la proteína del frijol, la energía del cereal Maíz y las vitaminas de la calabaza.
Además de ser bueno para nosotros era bueno para la tierra. Pues estas tres plantas vivían en una trilogía que ayudaba a la tierra. El frijol le proporcionaba el nitrógeno a la tierra que necesitaba después de producir el maíz y se incrustada entre el forraje del maíz para crecer, la calabaza al ser rastrera servía como control de insectos para que no se comieran el frijol y el maíz.
Esta herencia de la milpa la podemos ver más reflejada al día de hoy en las zonas norte del continente americano donde es más común el consumo de maíz y frijol en alimentos como la arepa, los tacos, las empanadas, los tamales y los frijoles con arroz que en el sur del continente donde es más tradicional el trigo con el consumo del pan para combinar todo tipo de comida y las masas de empanadas a base de trigo y no de maíz .
El Cacao se dio a conocer cuando Hernán Cortés conquistó la ciudad de México y Montezuma el gran monarca de esta ciudad, lo recibió con una taza de Chocolate para sellar la entrega de la ciudad, al dios que estaban esperando. Para los Mexican la llegada de Cortes fue el cumplimiento de una premonición de acuerdo con sus escrituras, que decían que esperaban un Dios venido de otro mundo y por eso le abrieron las puertas de la ciudad sin poner resistencia. Y fue la razón por la que le fue tan fácil a Cortes conquistar a México.
El futuro de los alimentos está en Latinoamérica
El fruto del Cacao al pesar de darse a conocer en México es originario del Amazonas y fue gracias al intercambio desde Colombia con México que era la antigua Mesoamérica que llegó a México. Al igual que el maíz, el frijol y la calabaza que llegó a Colombia por México.
Existió un intercambio comercial durante estas zonas del continente que permitió formar nuestra cultura alimentaria de hoy en día en Latinoamérica. Alimentos como la yuca que también vienen de la Amazonia, se modificaron de la yuca brava o negra que es venenosa y los indígenas la fueron domesticado hasta crear la yuca que conocemos hoy. Al igual que con la hoja de coca que era y es el alimento ceremonial para los indígenas.
Y no podíamos dejar de hablar de la papa que su origen es de los Andes de la cultura Incaica y se extendió por todo el mundo, hasta convertirse en uno de los alimentos más consumidos en el mundo y ser de los más producidos en Europa. O del tomate que su origen es de México y por eso allí lo llaman jitomate. O del aguacate que significa testículo en maya.
Es decir, Latinoamérica es el origen de la mayoría de alimentos que consumimos hoy en día. Y nuestra Cultura alimentaria es tan rica que por eso debemos cuidarla y mantenerla. A todos los Latinoamericanos nos une esta cultura que viene desde ese intercambio de la antigua Mesoamérica que en platos como el tamal lo podemos ver hoy en día reflejado en distintas recetas de tamales en cada uno de nuestros países.
Y lo mejor es que este intercambio de Mesoamérica también se fortaleció durante la conquista Española y durante la colonia en muchos platos Españoles que se fueron fusionando con los alimentos originarios de Latinoamérica y formaron caldos como el sancocho en Colombia, las empanadas de maíz del norte del continente y del sur de trigo que vienen de orígenes Árabes durante la conquista a España. El arroz que se convirtió en base de nuestra alimentación en Latinoamérica y que trajeron los españoles. Los embutidos con la llegada del cerdo y la leche de las vacas que originó nuevos dulces y coladas.
En fin todas estas fusiones e intercambios cómo sucedieron en Perú con los asiáticos, fue lo que les potenció sus pescados y mariscos en la comida Chaufa. Y sus raíces indígenas con el ceviche. Ahí en nuestras raíces y todo este intercambio de culturas de Latinoamérica y nuestras tierras fértiles es donde está nuestra potencia para ser el futuro de la alimentación mundial.
