Cuando hablamos de alimentos liofilizados el mejor ejemplo que tenemos es el café instantáneo. Lastimosamente con el café a pesar de que se deshidrata como las frutas y verduras para perder su humedad y lograr que pierda toda el agua y conservarlo por más tiempo. Generalmente usan el café pasilla que es el desperdicio de la última malla de la trilla del café, por lo cual no termina siendo el mejor café y por eso al final le añaden algunos saborizante para mejorar su sabor.
Igual ocurre con los snacks que tendemos a verlos como ultraprocesados por contener como lo chitos, boliquesos, pancitos galletitas conservantes, saborizantes artificiales, calorías. Sin embargo, si existen snacks saludables como lo son las frutas y verduras liofilizadas
El origen de los liofilizados proviene de Incas, vikingos, guerras y astronautas. La liofilización es una de las técnicas de conservación más antiguas que surgió de la necesidad y por la falta de recursos como ocurre en muchas culturas, pues era necesario lograr comida calórica y nutritiva, ultraliviana y que durara mucho tiempo para soportar largos viajes y guerras.
Los incas aprovecharon lo que tenían a la mano en Los Andes, gracias a una gran amplitud térmica marcada por noches heladas y días soleados. Y así pudieron convertir a la papa en chuño y la carne de llama en charqui. En el Amazonas los indígenas usan la fariña harina de yuca brava para nutrir sus sopas y hacer el casabe, con este alimento sobrevivieron los 4 niños perdidos en la selva del Caquetá durante 40 días en Colombia. También los indígenas usan el Mambe para sus rituales y casar. Que es hoja de coca en polvo con mezcla ceniza de hoja de yarumo. los primeros alimentos liofilizados de América.
Del otro lado del mundo, los vikingos tuvieron menos suerte: montañas más bajas, sol que pegaba oblicuo, pero igual liofilizaron arenques y más pescados que comían mientras devoraban a su paso tierras y mares.
El proceso de liofilización artificial fue desarrollado en 1906 por Arsène d’Arsonval y Frédéric Bordas en París. En 1911, dos científicos utilizaron esta técnica para preservar el virus de la rabia viva, que finalmente llevó al desarrollo de la primera vacuna antirrábica.
Más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos logró industrializar el proceso de liofilización y lo aplicó, por ejemplo, a liofilizar sangre para transportarla al frente de batalla. Con el tiempo, la industria farmacéutica consiguió, entre otras cosas, hacer antibióticos en polvo.
La industria alimentaria no se quedó atrás: entre las primeras cosas que liofilizó fue el café y lo hizo instantáneo, ése que se le debe agregar azúcar a diferencia del café especial que no se le agrega azúcar. Y la NASA que creo el Tan, jugo en polvo para los astronautas y otros alimentos liofilizados para alimentarse en la luna.
