Ser hospitalario no es tener muchas insignias en Airbnb, ser hospitalario es atender con gusto a los demás como si estuvieran en tu casa. La hospitalidad nace de la enseñanza de tus padres, del aprendizaje continua de servir a los demás.
El origen de la palabra hospitalidad viene de Abraham de uno de los profetas de la biblia, el nos enseña a recibir a todos los viajeros en su campamento y hacerlos sentir como si estuvieran en casa.
Cuando hemos recibido la enseñanza de nuestros padres, desde la casa de recibir a los demás y hacerlos sentir como en casa. Es cuando la experiencia es más auténtica y fluye la hospitalidad dentro de nosotros.
La hospitalidad no solo debe ser una transacción comercial, dónde nos pague por dar un servicio. Nos debe nacer servir a los demás, buscar que se sientan bien, que conozcan nuestra cultura, que se sumerjan en ella y donde podamos intercambiar con la otra persona, aprender también de su cultura.
Hoy en día es muy común encontrar alojamientos en grandes ciudades y sitios turísticos muy bonitos, con buena presencia y buenos precios. Sobretodo en plataformas como Airbnb y Booking donde obtienen muchas insignias por estas plataformas.
Pero donde te das cuenta que las personas que gestionan estás plataformas, nunca se alojaron en estos alojamientos. Pues cuando tú lo haces encuentras pequeños detalles que te hacen sentir que no son tan hospitalarios.
Empiezas a descubrir cosas como falta de iluminación en los cuartos, por qué las ventas no dan para el exterior, si no para pequeños patios internos, dónde nos sentimos más sofocados. Y existe una gran presencia de ruido por el poco espacio entre habitaciones y el uso de draywall y no de ladrillo que aísle el sonido. Y hasta colchones forrados en plásticos tan gruesos que a veces es imposible dormir por el calor interno.
Cuando hablamos del servicio muchas veces tienen una persona sin formación, que hace de recepcionista y de empleada del servicio a la ves. Dónde es imposible solicitarle una factura por qué no la sabe hacer y por qué se lo debe solicitar a su jefe que nunca la envía.
En nuestra opinión cuando priman estos detalles es cuando existe una hospitalidad que no es auténtica, existe más es un animo de transacción comercial de conseguir ingresos a través de un sector que está de moda, pero no con sentido y gusto por lo que hacen.