Seamos conscientes antes de alimentarnos, no comamos de manera automática, de forma inconsciente, revisemos las materias primas de los alimentos, preguntemos de donde vienen, quien los hace, leamos las etiquetas nutricionales, preguntemos que distancia recorren en llegar a la tienda.
La psico nutrición te enseña a tener un pensamiento respecto a la publicidad relacionado con productos alimenticios y las falsas promesas sobre comida sana. Tengamos cuidado con el marketing, no traguemos entero. No por que diga ligth y saludable lo va a ser, primero leamos las etiquetas nutricionales y si tiene ingredientes que no entendemos y que terminan en osa, es por que son químicos y nos pueden llegar hacer daño.
En la celebración y en la tristeza en la alegría y en las penas, por lo general en todas estas situaciones de la vida, esta presente la comida la mayoría del tiempo. La mayoría de las personas nos alimentamos para saciar nuestros estados emocionales. Sean positivos o negativos. Y no por que nuestro organismo no lo pida, somos seres emocionales y por lo tanto nuestra hambre también lo es.
Esto a motivado a la aparición de la Psico nutrición, una metodología de abordaje integral que combina la nutrición y la psicología y en la que también participan otros profesionales como médicos, entrenadores físicos, psquiatras y educadores. Cada uno con algo que aportar para prevenir deficiencias alimentarias y evitar afectaciones en la salud y el bienestar.
La psico nutrición te orienta a ir más allá de las superficialidades de las consecuencias de los hábitos alimenticios inadecuados producto de las emociones y te acompaña en la identificación de las posibles causas que están generando esta alteración psicológica y nutricional.
Identifica tus emociones y reconócelas antes de comer
Ingerir comidas que nos gustan elevan el nivel de algunos neurotransmisores en el cerebro, como la dopamina que genera sensación de bienestar. Por eso es común que cuando sentimos estrés o ansiedad busquemos refugio en la comida. El primer paso para gestionar esa necesidad es identificar las emociones, aceptarlas y reconocer que como personas somos mas que un sujeto que come, también sentimos y muchas circunstancias del presenta del pasado y del futuro impactan nuestro comportamiento. El trabajo, una situación económica, el amor nos predisponen a comer.
Identifica causas y establece objetivos a largo plazo
Identifica cuales causas pueden estar alterando tus emociones y que te esta llevando a un desorden nutricional. Y con base en ese diagnostico se crea un plan con objetivos a largo plazo que te permitan concentrarte en tus habilidades internas y cumplir tus metas de autonomía y autorregulación. Además, el acompañamiento profesional te ayudara a reducir el estrés y a fortalecer la adherencia al tratamiento indicado.
Toma decisiones autónomas respecto a tu alimentación
La meta al terminar la asesoría es que tengas la capacidad de tomar tus propias decisiones a través de los elementos que se te brindan para aceptar tu cuerpo y relacionarte de mejor manera con los alimentos a partir de aspectos psicológicos y comportamentales.
Las emociones normalmente son el mensajero, no las debemos ocultar. Si no escuchar y aceptar.
¿Qué hago si las emociones me llevan a comer?
Siempre pregúntate si es hambre o es causado por alguna situación puntual que estas viviendo. Tal ves sea cansancio o fatiga o que requieres hacer otra actividad. El cuerpo te lo esta pidiendo y le damos comida para saciar esa ansiedad. Escanea tu cuerpo, respira realiza movimientos conscientes. Y cuestiona si lo que necesitas, es un descanso, una caminata o leer un libro.
¿Qué alimentos están prohibidos?
Como siempre la retroalimentación en alimentación consciente es comer de todo, sobre todo alimentos y no ultraprocesados que es lo que nos desequilibra.
